IX

Quizás el verdadero amor sea una decisión; La decisión de jugártela por alguien, de entregarte a alguien sin pensar si te va a corresponder o si te va a hacer daño, o si será el amor de tu vida. Quizás el amor no es algo que te ocurre, quizás sea algo que tú escoges.

miércoles, 11 de marzo de 2015

Dame paz.

Siempre que se me deshace el hielo acaba doliéndome la tripa y se me pone una bola de lana en medio de la garganta. Y ha vuelto a pasar. Y joder, más decepciones ya no, por favor.

Si es que es jodido perder oportunidades por querer ser Iron-man pero juro que lo prefiero antes que esta sensación de los coj*. 
Que no quiero dar más cosas hasta que no reciba algo. Y tampoco es que esté pidiendo nada del otro mundo. Un poco de querer quererme y dejar de joderme, que tampoco es para tanto, joder. 

Que ya está bien de preocuparme por la gente, de intentar estar siempre, que luego lo único que hacen es darte por el culo, y sin vaselina. Y pa cuatro que hay cojonudos, pues oye, a esos sí hay que cuidarles. A los que están porque quieren formar parte, y no piden nada ni molestan ni tocan la vagina.

A los otros me encantaría poder decirles que me dejen vivir en paz, que follen más y paren de joderme viva, que no quiero más preocupaciones. Que quiero seguir riéndome toda la vida y sin ellos, casi mejor. Que no quiero irme a la cama por las noches de mala leche, ni que se me hinche la vena del cuello, ni me suban las llamas ardiendo hasta los mofletes, que me canso. 

Que ya vale, hombre. Que me quieran así por cómo soy, y no tenga que preocuparme más por lo que pasará después de escribir una frase. Esta soy yo, muy imperfecta y muy a gusto. Así que fácil, quédate para vivir conmigo o lárgate y déjame vivir sola.

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