IX

Quizás el verdadero amor sea una decisión; La decisión de jugártela por alguien, de entregarte a alguien sin pensar si te va a corresponder o si te va a hacer daño, o si será el amor de tu vida. Quizás el amor no es algo que te ocurre, quizás sea algo que tú escoges.

martes, 29 de julio de 2014

Volver a vernos

Y hemos vuelto a vernos.
A encontrarnos a hurtadillas,
entre cuatro paredes

Prometimos no volver a mirarnos,
y sin embargo;

Jugamos, otra vez, entre las sábanas
Bailamos como uno, como siempre

Como siempre que recaemos en este vicio,
que es nuestro y de nadie más

Caricias que sangran el alma,
querer;

Quererte a tí,
con la oscuridad que muestras a todos,
y la intensa luz con que me iluminas a mí

Tenerte sobre mi pecho,
jurar no volver a mirarte aunque estuviese viéndote
y sin embargo;

Sin embargo terminar acariciándote pensando en el siempre,
en echarle freno a ese reloj que suena de fondo. Tik, tak...

Verte, mirarte, observarte

Una vez más
los dos 
empapando las sábanas
perdiendo el aliento
amando ese momento
que es solo nuestro

Quererte por vicio,
y por nada más

Quererte por imposible,
por duro,
por desastre,
por caso a parte.

Quererte por ser tú,
por ser yo,
por habernos encontrado en ese puto instante.

Bailaremos hasta siempre, como nunca.
Un brindis por ello. Por el querer de una noche,
de muchas noches, de nuestras noches.

jueves, 3 de julio de 2014

Vernos.

Y volveremos a vernos.
Al otro lado de la calle,
al final de una taza de café
o cuando estemos durmiendo;
en una película,
en las letras de un verso mal escrito,
en el final de una triste historia
o al final de un orgasmo.
No sé dónde ni cuándo,
pero volveremos a vernos,
así sea a lo lejos;
pero volver a mirarnos,
eso ya es otra historia.